Thursday, November 20, 2008



En los árboles

A veces escribo cartas para no sentirme atado,
para no aferrarme a remilgos que yo quisiera abolidos
de mi vida. De mi vida.
Y pinto de colores los sobres. En el remite soy un enigma.
Espero siempre una respuesta para sentrime querido
como los niños chicos. Como los niños chicos.
Mensajes que llegaran, papeles envolviendo una piedra.
Mensajes de cariño que rompìeran el cristal de mi cuarto.
Quién pudiese ingerir un fármaco precioso...,
Convertir en realidad todos esos sueños.
Cartas que me dijesen cosas bonitas
como que vendrás a maullarme de contraseña en la madrugada
bajo mi ventana. Bajo mi ventana.
Que corriéramos campo a través, a la luz de los fulgores del alba.
Chispas blancas sobre el rojo violento. Y que hiciésemos cabañas
en los árboles. En los árboles.
Mensajes que llegaran, papeles envolviendo una piedra.
Mensajes de cariño que rompieran el cristal de mi cuarto.
Quién pudiese ingerir un fármaco precioso...
Convertir en realidad todos esos sueños

Quizá de todas las canciones que Manolo y Quimi hicieron juntos esta sea una de mis preferidas, para mi tiene un significado especial de antes, ese antes en el que la gente escribíamos cartas para comunicarnos, cartas que nos dijesen cosas bonitas, cosas alegres y en ocasiones también tristes.
Recuerdo mi caja de galletas, una caja que aún conservo en el fondo de mi armario, una caja que forre con todo mi sentimiento para poder guardar esas maravillosas cartas que me llegaban de amigos de toda la geografía, cartas en las que através de sus letras podía adivinar como se sentía su escritor.Sobres y sellos de todos los colores y estilos rompen hoy la monotonía olvidada de esas viejas cartas, hay días en los que la añoranza atraviesa mi corazón y tengo la necesidad de volver a ese tiempo, que es lo único que nos queda, los recuerdos y esas cartas.



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